He visto una sombra

la he oído reír.

Juro que veo cosas, no creo en fantasmas, pero sí en los demonios, no en esos que tienen cola y cuernos, un tridente y se ríen a carcajadas; sino los que no me dejan dormir por las noches, los que me golpean la cabeza con ideas que mi conciencia lucha por descartar, los que quieren que piense que estoy loca haciendo que vea como que las cosas se mueven, los que me hacen sentir que hay alguien que está esperando a que cometa una equivocación, la equivocación de mostrar mi locura.

Un loco jamás aceptará estar loco, porque dentro de su locura él piensa estar cuerdo. Mientras yo acepte estar loca ¿significa que estoy cuerda?

Juro que veo cosas, juro que estoy perdiendo el sentido de la realidad, juro que la locura me aterra, pero me seduce al mismo tiempo ¿Será que podría alojarme en la locura para escapar del desastre que ya es el mundo?

Juro que veo cosas, cosas que me aterra ver, porque sé que me estoy volviendo loca.

Sólo se necesita un detonante, y mi locura saldrá a flote.

"El más alto grado de lucidez es la locura..."

¿será que todos los demás están locos y soy la única con cordura? ¿será que en realidad sólo estoy asustada, presionada, sugestionada?

No quiero perder la cabeza, no quiero negar la realidad, no quiero que llegue el día en que vea algo que los demás no, pero juro que veo cosas... una sombra, que se asoma por la ventana, que me sigue, me susurra...

me asusta.